Para comenzar esta breve reflexión acerca de la biblia, es necesario decir que la Biblia es la Palabra de Dios; Y esta palabra es necesaria para nutrir y desarrollar la vida espiritual de todo ser humano que ha comenzado su nueva vida en Cristo.
Toda criatura necesita de alimento para vivir y desarrollarse; y el creyente, como nueva criatura espiritual necesita alimento espiritual para desarrollarse, sobretodo en sus primeros pasos.
Objetivo de esta breve nota:
Toda criatura necesita de alimento para vivir y desarrollarse; y el creyente, como nueva criatura espiritual necesita alimento espiritual para desarrollarse, sobretodo en sus primeros pasos.
Objetivo de esta breve nota:
Lograr que el discípulo de Cristo comprenda la
importancia de la palabra de Dios para su vida, y que la pueda incorporar a su
vida de devoción diaria, para que ésta, se convierta en regla de fe y conducta.
Una ves que el nuevo convertido ha creído en
Cristo, y le ha aceptado como su Señor y su Salvador, debe luego pasar a
incorporar en su vida una disciplina constante de devoción de fe hacia
Jesucristo; porque al venir a ser creyente en Cristo, ha nacido de nuevo; ha
sido hecho una nueva criatura, y esta nueva criatura debe tener un cuidado
apropiado para mantener su salud y su desarrollo. Así como un bebé recién nacido necesita cuatro
cosas fundamentales para su desarrollo, las cuales son: a) respirar- b)
alimentarse- c) ejercitarse- d) descansar; de igual modo, el recién convertido,
que es un niño espiritual, necesita de las mismas cosas para su desarrollo,
pero en un sentido espiritual. Así por ejemplo, el creyente necesita respirar,
lo cual es orar; Necesita alimentarse, lo cual es nutrirse de la palabra de
Dios; Necesita ejercitarse, lo cual es participar de la obra de la iglesia de
Cristo; Y además, necesita descanso, lo cual es alabar, adorar y meditar en el
Señor y vivir en Cristo. La Escritura dice: ."Pero los que hemos creído entramos en el reposo..." (Hebreos 4:3) Y: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré DESCANSAR. (Mateo 11:28).
I- LA NECESIDAD DE ALIMENTO ES ALGO NATURAL DE
TODA NUEVA CRIATURA.
a) Si usted ha hecho una sincera decisión de
fe por Cristo Jesús, usted ha nacido de nuevo, y en consecuencia usted sentirá
hambre por conocer mas de Dios. Y la biblia es el instrumento autorizado y eficaz que puede darnos conocimiento, acompañada de oración y Guianza del Espíritu.
b) La palabra de Dios les dice a los
convertidos a la fe de Cristo, que deben desear como niños recién nacidos, la
leche espiritual no adulterada, para que por ella puedan crecer (1ª Pedro 2:2).
c) La palabra de Dios es el mejor alimento
para el creyente.
La anterior declaración se equipara con la
declaración de los pedíatras en relación a los niños recién nacidos. Ellos
dicen que el mejor alimento para un bebé, es la leche materna. Y
advierten que cualquier otro alimento sustituto, puede causar severas
deficiencias en el niño.
d) Recuerde: No recurra a otros alimentos para
su vida espiritual que sustituyan la palabra de Dios; porque ello podría traerle
serias consecuencias en su desarrollo espiritual.
e) No
recurra consejos de personas que no tengan en alta estima la palabra de Dios,
en los cuales no se vea un desarrollo espiritual a causa de la palabra de Dios.
f) Corrobore con la Biblia todo lo que le
digan, pidiendo opinión de personas maduras en la fe.
g) Recuerde: Uno de los mayores daños que
sufre una criatura que se alimenta con sustitutos del alimento correcto, es una
deficiencia peligrosa en su sistema inmunológico. Tal persona estará más expuesta
a enfermedades, debilidad, deficiencias de inteligencia, e inclusive, estará más
propensa a morir.
Por eso:
h) Si quiere tener una provechosa vida de
creyente, tome la palabra de Dios como el alimento diario de la nueva criatura
espiritual que es usted ahora en Cristo Jesús.
II- CONSEJOS IMPORTANTES PARA ENTENDER LA
BIBLIA Y NUTRIRSE DE LA PALABRA DE DIOS:
1-
Escuche la palabra de Dios.
a) Usted tendrá muchas oportunidades de
nutrirse con la palabra de Dios en: Las células, grupos familiares, de
crecimiento o cualquier otra reunión donde se lea y exponga la palabra de Dios.
b) Usted podrá alimentarse en los sermones en
la iglesia.
c) En los estudios que la iglesia provee para
sus miembros.
Recuerde que la fe viene por oír la palabra de
Dios.
Al saber eso, escuche con reverencia la
palabra de Dios en cualquier momento y lugar donde se lea o exponga. Es necesario entender que la comida es el
alimento del cuerpo; de igual modo, la
palabra de Dios es el alimento del espíritu. La comida material mantiene y desarrolla la
vida que ha sido dada a luz. De ese mismo modo, la palabra de Dios mantiene viva y en desarrollo la nueva vida espiritual que ha sido dada a luz en nuestro interior
desde el momento que creímos en Cristo Jesús y nos arrepentimos de nuestros
pecados.
2- Lea
la palabra de Dios.
Recuerde: Si usted ha aceptado a Cristo y no siente
deseo de la palabra de Dios, eso podría ser un síntoma alarmante de que algo
esta andando mal en su vida de nuevo creyente. Sabemos que es deber de los adultos el
ocuparse de alimentar a los bebes que tienen deficiencia en el apetito, pero
también es responsabilidad del nuevo convertido, el procurar su alimento
espiritual. A diferencia de los niños naturales que no pueden buscar por sí
mismos corregir su falta de apetito, los niños espirituales, sí estàn en
capacidad de hacer algo al respecto. Por tanto, si su deseo por la palabra de
Dios no es abundante, busque ayuda pronta, con sus pastores, o con algún líder
de su iglesia que sea cercano a usted.
III- LA FE ES LA VIDA DE LOS JUSTOS; PORQUE
ELLA FORMA ACRISTO EN NUESTRO INTERIOR:
a) El oír la palabra de Dios, debe dar como
resultado el crecimiento y fortalecimiento de la fe en nuestra vida.
Si esa verdad no se cumple en la vida del
creyente, es por que éste, no está oyendo con atención correcta a la palabra de
Dios.
b) Recuerde: La fe viene por oír la palabra de
Dios: " Así que la fe es por el OÍR, y el OÍR, por la palabra de Dios" (Romanos 10:17). Si oír la palabra de Dios no está produciendo
un crecimiento de la fe en su vida, que se manifieste en su diario vivir; usted
no está tomando el nutriente del alimento espiritual; y por tanto, su vida
espiritual irá decayendo hasta morir; por que el justo por la fe vivirá. Ver Romanos 1:17.
c) Recuerde: El fin de oír la palabra de Dios,
es encontrar la revelación de la persona de Cristo (Juan 5:39). No se trata
solo de tener fe, sino que por la fe Cristo sea formado en nuestro interior.
Porque el que tiene a Cristo tiene la vida, porque Cristo es la vida (Juan
1:4; 6:40).
3-Estudie
la palabra de Dios.
a) El estudio de la palabra de Dios es más que
leer la Biblia. Estudiarla la palabra de Dios, es hacer un
análisis profundo de ella. Este análisis puede ser de: Un texto.Un capítulo.Un libro. Recuerde que la Biblia “protestante”
tiene 66 libros.Un tema.Un personaje etc.
b) Recuerde que cuando somos muy nuevos en el evangelio,
puede resultar complicado el estudio individual de las sagradas escrituras. Por
ello, le recomendamos hacerlo bajo la guianza de un maestro bíblico, o con la
de sus pastores. También, debería hacer uso de todos los programas de estudio que la iglesia
tiene en marcha. Eso según su nivel y madurez.
4-
Medite y comprenda la palabra de Dios.
a) Muchas veces cuando oímos, leemos, y
estudiamos la palabra de Dios, en algunos casos, parece que se escapa la
comprensión de ella. Pero cuando estamos meditando serenamente en la palabra
del Señor, nos viene de repente esa comprensión que nos habìa rehuido.
b) Podemos decir, que meditar en la palabra de
Dios, es contemplarla profundamente y en calma desde nuestro interior; con gran
reverencia y adoración a Dios que la inspiró.
c) Podemos decir que la palabra de Dios se nos
presenta en cinco dimensiones. Ellas son:
1) La dimensión del oír. Esta dimensión nos produce fe.
2) la dimensión de leer. Ésta, nos trae hábito.
1) La dimensión del oír. Esta dimensión nos produce fe.
2) la dimensión de leer. Ésta, nos trae hábito.
3) la dimensión de estudio. Esta dimensión nos
trae conocimiento.
4) La dimensión de la meditación. Ésta dimensión produce deleite y profundo amor por ella.
5) La dimensión de la memorización. Esta
dimensión nos produce una habitación de la palabra de Dios en nuestros
pensamientos.
d) Recuerde: La aplicación disciplinada en
nuestra vida de estos cinco ámbitos o dimensiones de operación de la palabra de
Dios, producirá en el creyente una transformación y una renovación de nuestra
mente. Vea romanos 12:1,2.
IV- TENIENDO LA MENTE DE CRISTO:
Hasta aquí, hemos explicado la importancia de
la Biblia, que es la palabra de Dios. A continuación complementaremos este
tema, viendo brevemente la influencia del Espíritu Santo asociado a la palabra
de Dios que mora en los creyentes fieles.
a) La Palabra de Dios debe actuar en toda su
dimensión:
Como vimos, la operación de la palabra de Dios
en nuestras vidas, en las cinco dimensiones que ya descritos, es vital para
producir en nosotros el desarrollo de la nueva criatura que hemos sido hechos
en Cristo Jesús.
b) La influencia de la palabra debe ser
habitual en nuestra vida:
Cuando estas cinco dimensiones de la palabra
de Dios llegan a ser habituales en nuestra vida, entonces se logra el objetivo
de llenar el corazón con la palabra de Dios, que produce en la iglesia un ambiente de amorosa armonía, y
propicia la adoración y la alabanza. Al
respecto, el apóstol Pablo nos dice:
La palabra de Dios more abundantemente en
vuestros corazones (Colosenses 3:16,17).
c) La influencia del Espíritu Santo:
Si a esta vivencia de la palabra de Dios en el
corazón, le agregamos la influencia de la comunión permanente con es Espíritu
de Dios, entonces tenemos como resultado el establecimiento de la mente de
Cristo en nosotros.
d) Acceso a las grandes riquezas de Dios:
Cuando el creyente alcanza esta dimensión de
crecimiento, empieza tener acceso a toda la sabiduría de Dios que ha sido
puesta para enriquecer a la iglesia. Podemos decir que tener la mente de
Cristo, es tener acceso al pleno conocimiento de las grandes riquezas que Dios preparó
para el creyente que le ama. Vea 1ª
Corintios 2:9-16.
e) Meta de crecimiento y madurez:
La meta de todo nuevo convertido, debe ser la
de alcanzar esta dimensión de crecimiento y madurez. La palabra de Dios
dice lo siguiente en concordancia con
esta verdad: “Por que ¿Quién conoció la mente del Señor?
¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo”.
6-
Memorice la palabra de Dios.
Para mayor provecho de este ejercicio (memorizar la palabra), busque versículos
de verdades doctrinales tales como: a-) La santidad. b-) La salvación. c-) El perdón. d-) La fe. e-) La protección de Dios. f-) El amor de Dios etc. Recuerde: Cuando ponemos en nuestro corazón la Palabra de Dios,
entonces evitamos pecar contra Dios.
Otra razón sumamente importante, es el
mandamiento de Dios acerca de memorizar, hablar, escribir y enseñar la palabra
de Dios a nuestros hijos y nietos. Vea Proverbios 7:1-3 y Deuteronomio 6:5-9.
Anímese, siga adelante en su desarrollo espiritual. Ame la palabra de Dios y ella le traerá abundantes bendiciones.
William Tercero M.
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